martes, 23 de diciembre de 2014

Comunazgo, fin de la era del líder individual

Comunazgo, fin de la era del líder individual 

Yesid Barrera

Para concluir el tema sobre la incapacidad del modelo de administración en el que opera la mayor parte de las empresas, me permito señalar algunas sugerencias a incorporar en las discusiones de juntas directivas y comités de desarrollo, y atreverse a cambiar con una propuesta de mejora sustancial para el 2011.

 Los empresarios de comunazgo —entendidos como aquellos que abandonan la idea de seguir preparando líderes individuales en sus organizaciones y se animan a revolucionar el negocio desde lo administrativo— tienen las siguientes mejoras en las que creen, implementan y promocionan:

1. La selección de su personal ejecutivo se convierte en el mayor reto, y por sobre los títulos y grados académicos de los candidatos se encuentra el análisis de la pasión por la vida, sus retos y sueños, el manejo emocional y la creencia en sí mismo. Rechazando de tajo a los conformistas y aquellos con complejos de superioridad.

2. No se contratan jefes, supervisores o controladores, se integran personas que traen un conocimiento, lo desean compartir, y lo colocan al servicio de los equipos de trabajo, donde cada uno se somete a una filosofía y valores institucionales.

3. Se respeta la diferencia como eje creador de la innovación y la fuerza de equipo, es una máxima de libertad en las organizaciones de comunazgo, teniendo como orientador, el debate transparente, directo y respetuoso.

4. No existe información restringida o reservada. Una vez que el candidato se convierte en colaborador tiene acceso a todos los registros, por un principio básico y de alta prioridad, se trabaja en confianza y si existe algo que sancionar en este tipo de empresas, es la deslealtad.

5. Los colaboradores tienen como prerrequisito disfrutar lo que hacen, dignificarse como personas, para que lo laboral mejore su calidad de vida, el salario no es lo más importante. Su salud, familia y futuro son los principales retos del contrato entre el colaborador y empresa.

6. En comunazgo, las empresas no encuentran sus principales discusiones en definir el precio del producto o servicio, el foco de atención primario está en definir el precio de su talento humano, lo cuidan y conservan. 

7. La tecnología es indispensable y se invierte, pero la misma debe estar al servicio del talento humano y no al contrario. Comunazgo es empresa de humanos, no de máquinas. 

8. Comunazgo no domestica personas, no aplica sistemas de castigos y recompensas, el modelo es de autogestión y resultados, todo lo otro es vanidad.

Sin ser una respuesta fácil, trataré de integrar en un grupo de comentarios las características obligantes que debe tener una persona que aspira a convertirse en líder, no por su propia decisión, sino por el consenso del grupo con el que trabaja y colabora; allí está la primera y gran diferencia que abordamos en Comunazgo: usted no es líder por su propia decisión, lo es por sus actos, por su ejemplo y por la mirada y aprobación de aquellos con los que trabaja. Acabemos con el paradigma de los que creen o se autoproclaman líderes, el título que pueden recibir es jefe, supervisor o director, pero líder implica un concepto mucho más amplio que el otorgado por una empresa. Para llegar a ese peldaño debemos revisar algunas de las cualidades que debe poseer un personaje de estos. 

La clasificación que hago a continuación no presenta un orden especial:

1) Comunicación: el porcentaje más alto de dificultades en los equipos se debe a una mala comunicación. Cuando busque un nuevo gerente o director verifique su forma de comunicar, atrás quedaron las pruebas únicas que miden inteligencia o habilidades matemáticas. Hoy hablamos con la persona, no de cualquier tema, de nuestros problemas, su visión y forma de resolver, mientras tanto evaluamos su forma de comunicar. 

2) Visionario y con iniciativa: estas dos cualidades son indispensables en un líder para marcar los territorios a futuro y paralelamente promover la ejecución, a esto le llamamos gente estratega, piensa a largo plazo y garantiza que lo diseñado se convierta en realidad. 

3) Disciplina: talvez una de las más difíciles de conseguir, ese hábito que marca la diferencia entre unos y otros. Los japoneses señalan que no se trata de ser más inteligentes, la cuestión es ser disciplinados y punto. La disciplina en un equipo permite que se honre la palabra, lo que se dice, se hace; el resto es “carpintería”. 

4) Energía: como bien lo expresa Jack Welch, el líder debe tener energía y a la vez ser capaz de irradiarla a otros, y se consolida cuando energiza a quienes se encuentran a su alrededor. Un líder no vive de la venta de frases o discursos, debe ser un actor directo a través del ejemplo. 

Por ello acude a lo más propio, que es su energía, la traslada a otros para que la sigan reproduciendo y genera poder en todos los niveles de la organización. Terminemos con otro paradigma en la organización, el hecho de que aquel que tiene más información es más poderoso, pues eso mata cualquier equipo y nos convierte en roba datos, alimentando una que otra neurona, que finalmente morirá en ese intento. 

5) Manejo de conflictos, uno de los aspectos de mayor dificultad en los grupos de trabajo es la imposibilidad de entender que somos diferentes en físico y pensamiento y que frente a ello los ejecutivos deben desarrollar habilidades para trabajar y enaltecer la diferencia y darle un tratamiento a los problemas que son lo más natural en los equipos, se hace necesario que la gente se diga las cosas en la cara y con respeto y no enrede el problema y esconda sus miedos en correos electrónicos y chismes de pasillo que lo único que logra es darle ventajas a la competencia y destruir la confianza interna. 

6) Servicio. Un aspecto clave puntual y diferenciador de un líder es su disposición a servir, esa impactante cualidad de los seres humanos que entienden que la principal tarea de un integrante de un equipo es servir, entregar, dar para posteriormente recibir. Un líder que es auténtico en servir y apoyar a otros rompe con una tradición todavía latente en algunos grupos, de servilismo y burocracia, trámites, formatos, plantillas, un procedimiento detrás de otro y, por supuesto, correos para dejar constancia de quién es el inepto, cuando usted decide servir mata esas enfermedades y aviva la organización, donde solo se hace lo estrictamente necesario para hacer efectiva la estructura. 

7) Compromiso. Algunos llamados líderes tienen un halo muy especial que los protege de equivocaciones, incumplimientos, atrasos y, en general, de todo aquello que sale mal, son expertos en localizar culpables y aplicar la sanción que enmienda su incompetencia de liderar el proceso y
de asumir la responsabilidad que le corresponde como líder e integrante de un equipo. Un líder comprometido es aquel que se involucra, que se sube al camión cada cierto tiempo para conocer la acción de cerca, que visita clientes, que se junta con los colegas en la planta, laboratorio o taller, que colorea, de vez en cuando, su traje y el lienzo de la organización con pintura de la realidad que vive el resto del equipo. Un líder real es aquel que enaltece los buenos resultados, los disfruta y se enorgullece de los mismos, pero cuando las noticias no traen números negros, asume su responsabilidad, no huye a buscar su escritorio para elaborar una estadística que lo libera de la responsabilidad, la claridad moral de un líder está cuando señala las equivocaciones cometidas en el procesos y los posibles errores del equipo, donde él es parte. 

8) Un ingrediente final es la obligación que tiene de saber leer las diferentes situaciones y descubrir las oportunidades que traen, en especial cuando se pasa por momentos difíciles, lo que requiere una actitud positiva. Un líder tiene esa capacidad de estar en medio de la tormenta, analizando qué puede hacer con el agua como recurso y no solo mojándose, observando cómo atrapar el rayo amenazante para utilizar esa energía y no solo buscando cómo huir para protegerse, el líder positivo siempre puede ver en la oscuridad. Hasta la próxima. Incluimos en el presente artículo a manera de resumen, otras características de ese líder que sin complejos lleva las organizaciones por un sendero diferente, un poco extraño para algunos, pero consolidándose por los resultados que ofrece. Los resultados en las organizaciones de Comunazgo tienen un componente estratégico; cuando hablan de resultados no se refieren exclusivamente a los estados de pérdidas y ganancias. Comunazgo incluye: la preocupación por un mejor estado de salud corporal, apoyo para conseguir equilibrios emocionales y mentales de toda su gente, y una disposición natural por las familias de quienes se encuentran vinculados.

Comunazgo abarata la inversión en costosas y blindadas oficinas que tienen elevadas paredes para conservar información, pues al mejorar los niveles de confianza, se abren los espacios y las personas trabajan mejor, la comunicación es más directa y real, se liquida gran parte de la burocracia que genera el chat, correo electrónico o la “reunionitis” y se enaltece la palabra y su valor, con miradas a los ojos, dejando de lado una serie de íconos con caritas en muchos casos engañosas, pues el que coloca una sonriente, no necesariamente se está sintiendo así. Comunazgo alerta sobre el peligro de no saber usar la tecnología en las organizaciones de hoy, colocando una herramienta tan valiosa en contra y no a favor. Comunazgo, como cualquier otra propuesta, tendrá entusiastas y decididos gerentes, directores y presidentes que desean acompañar los esfuerzos del capital, con un modelo de gestión que toma compromiso de todos y no de unos cuantos. Comunazgo también tiene una serie de detractores y los hemos encontrado en nuestro ejercicio de consultoría. 

Hemos señalado en el libro dicha gama de ejecutivos que, amparados en un modelo atrasado que da poder, jerarquía y un único liderazgo para él o ella, prefieran matar la propuesta en su propia decisión de no admitirlo como fórmula posible ni experimental. Dentro de las características de los líderes de Comunazgo señalamos que es necesario asumir la responsabilidad que implica ese momento, circunstancia o vivencia. Comunazgo no considera al líder desde la posición o la jerarquía, lo ubica en todos los lugares de la empresa y por eso deja de ser exclusivo y se vuelve natural en la organización. Para hacer realidad la propuesta se necesita carácter, ese componente que nos facilita hacer lo que consideramos apropiado, proponiendo un esfuerzo individual consciente y verificable, un beneficio grupal amparado en resultados. Hasta la próxima.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario